Una institución seria, tenaz, de avanzada; que visualiza el arte en conjunto, como un todo. Un lugar a las faldas del cerro Ávila, un refugio para el arte, para la cultura. Un lugar para que el alma y el cuerpo se encuentren y nos recuerden que somos seres humanos, que necesitamos alimentar la sensibilidad, que hay sonidos, emociones que hacen vibrar nuestro interior y nos brindan la maravillosa experiencia de apreciar las Bellas Artes.
